Lo declararon culpable por tres estafas por más de 37 mil dólares y 42 mil pesos, con la presunta venta de una camioneta RAM, una Amarok y un Scirocco.
La última semana se llevó a cabo un juicio contra David Marcelo Juan, a quien el fiscal Marcelo Silva acusó de ser el autor de tres estafas mediante la venta de vehículos a partir de la publicación de los mismos en una página web. Las presuntas estafas habrían sido por el monto total de 37.000 dólares y 42.000 pesos.
El acusado es ciudadano neuquino, perteneciente a la comunidad zíngara y, junto a una mujer no identificada, simuló tener a la venta vehículos que nunca entregó.
La primera estafa comenzó a principios del 2019, cuando la víctima se contactó con el David Marcelo, que utilizaba otro nombre, y acordó la compra de una camioneta RAM que estaba publicada en un sitio web. El precio de venta era de 27.000 dólares. El 12 de marzo el comprador/víctima viajó a Neuquén desde Pinamar y se encontró con el imputado, quien luego de ofrecer el vehículo para realizar una prueba, le presentó a la gestora (cómplice), con quien compartieron el almuerzo. Luego firmaron un boleto de compraventa y la mujer se llevó toda la documentación.
“Al reclamar la entrega del rodado comenzaron las demoras, señalándole que la gestora se encargaría de la transferencia, convenciéndolo de regresar a Pinamar”, explicó el fiscal durante el juicio. A partir de ese momento comenzaron los reclamos al vendedor, recibiendo como respuesta que “se olvidara de la RAM”, ofreciéndole en su reemplazo una camioneta Volkswagen Amarok. Silva explicó que la víctima nunca recibió la camioneta ni la devolución del dinero que pagó.
La segunda de las estafas que la fiscalía le atribuye al imputado fue con la presunta venta de un auto Volkswagen Sirocco. A raíz de la publicación del vehículo a la venta en una página web, el 25 de febrero de 2019, la víctima contactó al vendedor y acordó las condiciones para concretar la operación. Unos días después viajó junto a su padre desde Buenos Aires a Neuquén capital y, luego de probar el vehículo, entregó la suma de 10.300 dólares. Al igual que en el otro hecho, en ese momento intervino una mujer, quien actuó como gestora, y se dirigieron al Registro de la Propiedad, en donde firmaron el formulario 08. De allí fueron a comer, según se indicó a las víctimas, “mientras el titular firmaba la documentación”. Con el mismo argumento que en el otro caso, comenzaron las demoras en la entrega, que finalmente nunca se concretó.
Mientras que la tercera de las estafas ocurrió en paralelo con el segundo hecho. El imputado le ofreció al padre de la víctima, que se había ido a concretar la operación al Registro del Automotor, una camioneta marca Volkswagen Amarok a cambio de 1.300.000 pesos. El 1 de marzo de 2019, ya en su ciudad de origen, transfirió 42.391,50 pesos en concepto de seña, tras lo cual, con argumentos similares a los utilizados en los otros hechos, la operación nunca se concretó.
Todo esto, según el juez Ravizzoli, fue debidamente acreditado durante el juicio, por lo que declaró culpable al imputado. Ahora se espera que, en los próximos días, la oficina judicial fije la fecha para la audiencia de cesura, que configura la segunda etapa del juicio, para definir la pena que Marcelo David Juan deberá cumplir por los hechos por los que fue declarado culpable.