Desde el mes de mayo están con retención de tareas cuando su jefe, con sintómas de COVID-19, se presentó a trabajar igual.
Tres empleados del Consejo Provincial de Educación (CPE) denunciaron a su jefe, el director provincial de Modernización, luego de que se presentara en la oficina cuando tenía síntomas de COVID. El funcionario debía estar aislado y rompió todos los protocolos, según consta en la denuncia interna. No van a trabajar hace cuatro meses.
Los empleados permanecen en retención de tareas en sus casas y no quieren volver a sus puestos laborales hasta que el CPE garantice las medidas sanitarias y tomen medidas, ya que tras los síntomas el denunciado dio positivo de coronavirus poniendo en riesgo a sus compañeros.
El conflicto comenzó el pasado lunes 3 de mayo, previo a la segunda ola de la pandemia. Los cinco empleados firmaron una nota, dirigida a la ministra de Educación, Cristina Storioni.
Según detallan en la denuncia que elevaron el 13 de mayo, “el director provincial mencionado, fue a trabajar con síntomas: tos, congestión, y con un malestar general”. Al día siguiente, antes de ingresar a la oficina en su jornada laboral, avisó que “debía asistir a una reunión con la Señora Subsecretaria”.
“Al salir tomó su barbijo, (que no utilizaba mientras tosía en la oficina), y se dirigió a dicha reunión. A los minutos se lo ve llegar nuevamente a la oficina y de ahí no supimos nada más. Cabe destacar que un compañero le solicitó que diera el ejemplo y se colocara el barbijo y/o abriera la ventana para cumplir con las normas, y fue invitado a salir de la oficina argumentando que ‘vos no tenés porque estar acá en ésta oficina…’ siendo que allí nos remitimos cada vez que se nos solicita una información o cuando es necesario comentar situaciones o solicitar pasos a seguir”, expuso.
Al día siguiente, los empleados de esa oficina fueron a trabajar de “manera normal». Recién el día 6, uno de los empleados «consulta al director G. Z. por el estado de salud del Sr. L., ya que no se lo veía en la oficina ni se escuchaba la tos que días anteriores se escuchó durante la jornada laboral. A lo que Z. comenta que D. está bien, nosotros NO somos contacto estrecho que dio negativo, que D. L. debía aislarse porque la mujer dio Covid positivo y él es contacto estrecho».
Según manifestaron «de ahí en más fue una sorpresa tras otra y comenzó el miedo a la posibilidad de que varios de nosotros estuviéramos afectados por el virus, ya que nunca hubo cuidados ni advertencias».
Al parecer, ese mismo día por la noche, D.L. informó mediante un mensaje de WhatsApp en el grupo de trabajo que era positivo de Covid-19.
Los empleados hicieron saber los hechos al gremio ATE, advirtiendo la situación pero hasta el día de hoy no obtuvieron respuesta.