El hombre de 40 años era del barrio San Lorenzo y lo hallaron sin vida este jueves por la mañana. La Justicia investiga las causas del deceso y no desestimó las similitudes con una muerte parecida en Roca.
Un hombre murió en la vía pública este jueves por la mañana y personal policial investiga el hecho. Lo calificaron como una «muerte dudosa». Fuentes judiciales confirmaron que se trata de Mario Alejandro Medina, de 40 años de edad, quien era un vecino del mismo barrio San Lorenzo.
El hecho, que conmocionó a los habitantes del sector en las primeras horas de la mañana de este jueves sumó otro dato de valor para la investigación durante la tarde. Apareció su vehículo a cinco cuadras, en Belgrano y El Cóndor.
El comisario Inspector José Mendez relató que los vecinos del barrio alertaron a la policía por «un hombre venía gritando que lo venían siguiendo». Luego, cuando llegó a la esquina, trató de ingresar en un inmueble, «golpeaba la puerta y se desvaneció», mencionó Mendez.
El SIEN se hizo presente en el lugar y después de realizarle reanimación constataron la muerte del hombre.
La primera información sobre el hallazgo del auto establece que se encontraba abandonado con las llaves puestas. Según lo aportado por testigos, el hombre dejó el vehículo «gritando» en un claro estado de alteración.
Medina vivía en cercanías de República de Italia y Racedo y era padre de dos hijos. Las diligencias de la investigación también se trasladaron al domicilio.
Desde la Policía de Neuquén confirmaron que la familia del hombre fue anoticiada y se iniciaron los trámites de la investigación que impulsa la fiscal de Homicidios, a cargo de María Eugenia Titanti.
Las similitudes sobre el contexto de la muerte y varios detalles previos al deceso, no pasaron desapercibidos para la Justicia que investiga si hay una relación con el caso de un joven de 38 de Roca.
El lamentable desenlace ocurrió el pasado sábado 4 de enero, en la zona norte de la ciudad rionegrina.
Allí los vecinos dieron aviso a la Policía sobre un hombre que corría semidesnudo por la calle, golpeando las casas y gritando. Una situación parecida a la detallada en el caso de Neuquén.
Finalmente, tras recibir una primera atención en la vía pública, el joven murió y fue reconocido por su padre en el lugar.
