Una familia de Cipolletti honra la memoria de sus seres queridos, padre e hijo, que perdieron la vida hace casi cuatro años en un accidente en la Ruta 237.
El dolor de una familia del barrio cipoleño Anai Mapu, que perdió a dos de sus miembros en un trágico accidente en la Ruta 237 de Neuquén, sigue intacto casi cuatro años después. Guido Lautaro Fierro, de 43 años, y su hijo Thiago Sebastián Fierro López, de 11 años, perdieron la vida en aquel fatídico episodio que dejó a la familia desmembrada por la desgracia.
Este último sábado, un emotivo y conmovedor homenaje tuvo lugar en la Ruta 237, donde ocurrió el accidente. Los parientes de Guido y Thiago, provenientes de Cipolletti, se acercaron para pintar dos estrellas amarillas en el lugar y dedicarles un cartel en su memoria. El dramático episodio tuvo lugar en el kilómetro 1.580 de la Ruta 237, entre Limay Chico y la estancia Chacabuco, a unos 50 kilómetros de Dina Huapi.
Los testigos afirman que en el acto reinó la emoción, con abrazos, lágrimas, respeto y la suelta de globos en el sector donde ambos perdieron la vida.
El momento más conmovedor llegó cuando Mabel, la madre de Thiago Sebastián y esposa de Guido, brindó un sentido mensaje. «Ya van a ser 4 años y pude llegar al lugar. Mi Seby tierno, gracias a Dios por habérmelo prestado durante 11 añitos; lo cuidé, lo amé y lo amaré siempre. Ahora te lo devuelvo. Mi Gordo loco, por siempre te amaré. Duerman en los brazos de papá. Hasta nuestro encuentro en la eternidad», expresó mientras el resto de la familia intentaba contenerla.
Mabel agradeció profundamente este homenaje y destacó a su familia por estar a su lado en medio de este dolor inmenso que todavía siente. También agradeció a Sendero por el hermoso cartel y su conmovedor gesto, a la familia Fierro, a la estrella amarilla de Cipolletti y Neuquén, así como a la policía de Neuquén por hacer posible pintar las estrellas y colocar el cartel. «Gracias. Gracias. Gracias», concluyó.
